En una publicación del Banco de Desarrollo de América Latina, Nelson Larrea, ejecutivo principal de la Dirección de Desarrollo Productivo y Financiero, señala que el Pacto Verde es el vínculo entre unas personas sanas, unas sociedades sanas y un planeta sano. Sitúa a los sistemas alimentarios sostenibles en un lugar central del Pacto Europeo.
El Pacto Verde Europeo fue lanzado en diciembre del 2019, con la ambición de la Unión Europea de ser el primer continente climáticamente neutral al 2050.
Se basa en 7 pilares, cada uno con una estrategia para su implementación: energía limpia, industria sostenible con énfasis en economía circular, reconstruir y renovar edificaciones, movilidad sostenible, biodiversidad, “del Campo a la Mesa” y eliminar la contaminación.
Dentro de los retos que plantea está que si el sistema agrícola y alimentario europeo, apoyado por la política agrícola común ya es una norma mundial en términos de seguridad del suministro, nutrición y calidad, ahora también debe convertirse en la norma mundial de sostenibilidad.
Explica que la transición hacia un sistema alimentario sostenible puede aportar beneficios medioambientales, sanitarios y sociales, así como ofrecer unos resultados económicos más justos y que la recuperación de la pandemia nos situará en una senda sostenible.
Los objetivos de la UE son:
- Garantizar la seguridad alimentaria ante el cambio climático y la pérdida de biodiversidad,
- Reducir la huella ambiental y climática del sistema alimentario de la Unión Europea
- UE,
- Reforzar la resiliencia del sistema alimentario de la Unión Europea
- Conducir a una transición global hacia una sostenibilidad competitiva «de la granja a la mesa».
En Costa Rica, el cumplimiento del Pacto Verde es todo un reto que el sector piñero asumió con seriedad, al consultar a ambas cámaras que agrupan la mayoría de los productores en el país.
Sostienen que es un requisito que deben cumplir para seguir conquistando a los consumidores en el Viejo Continente.
Tanto CANAPEP como la Cámara de Piñeros Unidos de la Zona Norte coinciden en que sus afiliados están conscientes y con procesos claros para el cumplimiento de las metas al 2050.
En el caso de CANAPEP, aseguran que van un paso delante de lo que plantea el Pacto Verde y que su Manual Socioambiental contiene muchos de los requisitos que exige la Unión Europea.
Piñeros Unidos, por su parte, se fundó hace dos años y también sus afiliados incorporan en sus actividades diarias prácticas alineadas con las metas de la UE, como es el uso de productos orgánicos en sus procesos productivos.
