
Después de meses encadenando cuellos de botella, falta de equipos disponibles y subidas sin precedentes en el precio de los fletes, la logística marítima mundial se enfrenta a las nuevas consecuencias imprevistas que ha desatado el conflicto bélico en Ucrania.
De acuerdo con Drewry, principalmente Rusia, aunque en menor medida también Ucrania, son actores importantes en el mercado de contenedores refrigerados; en conjunto representan alrededor del 4,5% del tráfico marítimo refrigerado anual. Por tanto, cualquier interrupción en este comercio tendrá un impacto significativo para los propietarios de la carga, las líneas navieras y los operadores de buques frigoríficos especializados.
Solo Rusia importó cerca de 4 millones de toneladas de productos frescos por vía marítima en 2021. Cualquier reducción de la demanda de carga proporcionará al menos un respiro a los propietarios de carga, ya que habrá un excedente de equipo y espacio que probablemente sea aprovechado a corto plazo por los expedidores de productos de temporada de la costa oeste de Sudamérica, que actualmente están luchando por obtener capacidad hacia Europa y Norteamérica.
No obstante, según Drewry, las mayores implicaciones para el negocio de la exportación de frutas se harán sentir muy rápidamente, a medida que los mercados tradicionales se vean sobreabastecidos de productos ejerciendo presión sobre los precios.
Los volúmenes de caducifolios procedentes de Chile, Perú y Argentina se verán afectados de inmediato, ya que todos los países se encuentran en plena temporada de exportación en estos momentos. En cuanto a los cítricos, el embarque de fruta de Marruecos está terminando, pero Sudáfrica y Argentina comenzarán a exportar a partir de mayo.

El cargamento directo de bananas con destino a Ucrania es de aproximadamente 250.000 toneladas al año, con cantidades menores de cítricos y caducifolios que normalmente proceden de países más cercanos. Sin embargo, cabe recordar que los servicios de carga directa en el Mar Negro han cesado con efecto inmediato, lo que supone un grave problema logístico para la carga que ya está en el agua.
Costa Rica y sus exportaciones de piña también sentirán el efecto pues Europa es el segundo mercado más importante y tanto Rusia como Ucrania son países consumidores de la piña producida en Costa Rica.
Según datos de la Promotora de Comercio Exterior (PROCOMER), a Rusia se exportaron 57.199 toneladas de piña significando 27,3 millones USD en 2021, convirtiéndose el octavo país que mas consume piña costarricense.
Por su parte Ucrania, recibió 2.235 toneladas de piña, lo que significo 1 millón USD en 2021. Convirtiéndose en el vigésimo séptimo país que más consume piña.
Destino | Millones USD (2021) | Toneladas |
Rusia | 27,3 | 57 199 |
Ucrania | 1,0 | 2 235 |
Total general | 28.3 | 59 434 |
Por lo tanto, se espera que el impacto global sea mixto, con el comercio de importación más afectado que el tránsito frigorífico de exportación, al menos a corto plazo.
Fuente:
Promotora de Comercio Exterior (PROCOMER)
